Paz

En el interior de la línea que separa la felicidad de la tristeza he hallado mi cobijo. Es un lugar blanco, que se deja infectar de colores pasteles que atenúan la soledad y aportan chispas de colores al pulido blanco. La pureza de este lugar me lleva al sentimiento que necesitaba. Paz. Paz interior. No nace de la resolución de mis problemas, ni de la superación de mis secas cicatrices, sino del silencio de mis pensamientos. Mi mayor miedo, están ahora callados, han firmado una tregua de paz. Desconozco la fecha en la que volverá la guerra, y mi mayor temor es que callar supongo reforzar. Pero ahora mismo desconozco otra solución, y este mundo parece tener chispas de colores sólo con el silencio. Así, permaneceré callada, me esconderé en el retumbar de los altavoces, me perderé en el sudor del baile, disfrutaré del sabor de la locura, engañaré a mi cuerpo las noches de verano con algún liquido placentero que le hago sentirse libre. Mantendré mi mente callada, y mi corazón encarcelado. Sólo hasta que aprenda a extirpar partes de mi que no deberían haber sido regaladas. Y de la mano del silencio, conoceré de nuevo la estabilidad, la calma interior, aceptaré un volcán bullendo al fondo de mi estómago, y trataré de olvidar su presencia, hasta que un día simplemente me olvide de ella. Y entonces despierte, y deje estallar el volcán.

Como siempre colgando de un sueño

Pensar en ti, es recordarme en las sombras de un pasado ya borroso...Apareces siempre que el cielo se nubla, y sigues ahí cuando sale el sol...No encuentro cobijo en otros mundos,son tan sólo un poco de agua oxigenada para mis cicatrices, que cada cierto tiempo, cual puntual reloj, se vuelven a abrir...Y así, me refugio en el trajín del día a día para aprender a vivir tanta tiempo ya, sin ti...No echarte de menos es como no tener hambre, no pensar en ti es como dejar de respirar..puedes controlarlo sólo por un tiempo, luego te hace falta...

Odio lo que me haces sentir, por ser lo más puro y limpio que he sentido jamás...Me siento un sentimiento con patas a el que le han dado cuerda para andar a lo largo de los años sin más rumbo que tu mirar...

Soy capaz de repetirle a la grandeza de la luna mil veces, ya no lloro por él, mientras mi corazón pega sus trizas con pegamento de papel...para tres segundos después volver a empezar...y como un bucle, seremos infinitos en el tiempo...hasta que mi memoria consiga olvidar, y mi corazón, simplemente aprenda a callar

Quizás

Quizás ya no eres tan guapo como antes
Ya tu belleza no me deja sin aliento
Tus chistes no me hacen tanta gracia
Tu simpatía a veces se vuelve antipática
Probablemente ya no te echo tanto de menos
Ni me pareces tan inteligente
Ni tan reflexivo...
Será porque ya no me sorprendes
Porque he aprendido a conocerte
Pero tu mirada me da escalofríos...y eso me preocupa